Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2011

EQUILIBRIO

Imagen
Mis pensamientos parecían niños en el kindergarden a la hora del recreo, saltaban, corrían y jugaban en mi cabeza sin que pudiera detenerlos. Necesitaba que se sentaran y me escucharan, o por lo menos se quedaran quietos para que al fin la tranquilidad que tanta falta me hacía me permitiera tomar decisiones postergadas. ¿El mar?, ¿Por qué no los llevo a la playa?, sé que después de gastar energía, terminarán cansados y cerrarán sus ojos para dormir. Tomé el bus más cercano y me dirigí al lugar que sabía podría despejar mi mente. La melodía del vaivén de las olas al rozar entre sí, y el aroma salino equilibraban mis pensamientos y clarificaban las respuestas. No era un día cualquiera, era especial, las paredes blancas ya no eran mi cárcel, ahora tenía pinceles y una paleta de colores, sólo tenía que elegir qué hacer y cómo hacerlo. Me dije: ¡manos a la obra!, y lo primero que dibujé fue una puerta para salir de ahí. Caminé admirando los colores que veía alrededor, matices que f

SUEÑO DESPIERTA

Imagen
Y la tarde moría, al igual que ella, el cansancio era cada vez más aplastante y sólo quería ver la oscuridad para regresar a casa y recostarse en lo que encontrara más próximo. Últimamente sus fuerzas habían disminuido y llegado un momento no le respondían las extremidades, inclusive sentía los párpados pesados la mayor parte del tiempo y sólo buscaba un lugar donde cobijarse y olvidarse de todo lo que tuviera pendiente. La noche era el analgésico perfecto, pero era una lástima que su efecto durara algunas horas, ya que al día siguiente debía continuar pese a no tener del todo cargadas las baterías; sin embargo tenía que hacer un esfuerzo desmedido para levantarse de la cama y continuar con la lista de pendientes que llegaban en fila. Hace algunos días el sonido de las conversaciones en voz alta, los tacones acelerados y el timbre de celulares y teléfonos la atormentaban, pero ahora los escuchaba más lejanos, parecían provenir de la oficina que se encontraba al final del pasi

DETRÁS DE LA CORTINA

Imagen
Subía las escaleras con el cansancio sobre su espalda, eran las siete de la mañana y sólo deseaba tener su cama en frente. Mientras pensaba en recostarse y dormir un rato, alguien bajaba rápidamente por las escaleras, era un chico que no había visto antes y por la ropa que usaba podría tratarse de algún abogado o administrador de alguna empresa, no lo sabía y tampoco quería adivinar en ese momento en el que el sueño era su único acompañante que la conducía a su habitación. Llegó, cerró las cortinas y dejó que Morfeo la abrazara entre sus sábanas. Era complicado trabajar por las noches y a la vez estudiar en las tardes, pero debía hacerlo para pagar sus gastos y deudas que tenía pendientes. Sólo debía acostumbrarse a la rutina y a tomar todo con calma, porque sólo sería temporal. Era medio día y la mala noche le cobraba la factura. Se bañó y se fue a almorzar para luego dirigirse a la universidad. Trataba de mantenerse despierta pero las palabras del profesor eran el mejor somnífe

FIN DEL CAPÍTULO

Imagen
El amor, calidez, locura y entrega. Quienes realmente nos enamoramos conocemos el significado de entrar a ese mundo de ensueño, que a veces se transforma en un infinito invierno, el cual tarde o temprano termina. Como dijo un amigo (qué será de él), después del eclipse vemos el sol, y tuvo razón al decirlo, ahora le doy la razón. Hace algunos días conversaba con una vieja amiga, mi mejor amiga, y me contaba una de sus tantas historias. Pero esta vez la noté distinta, no estaba triste como la última vez que habló sobre el “tipo ese”. Sentía la frialdad en sus palabras, la resignación, había decidido voltear la página y nada ni nadie la haría cambiar de opinión. Sabía que había hecho mucho, dejó su orgullo de lado y no continuaría haciéndose más daño. Las cartas, regalos, fotos, mensajes de texto y número telefónico irían directo a la máquina trituradora del olvido, y, en una bolsa negra asfixiaría cada detalle que le impedía continuar con su decisión de dejar el pasado en su lugar. Las

YO NO SÉ MAÑANA II

Imagen
A pedido de una gran amiga escribí la continuación. Me miro al espejo por última vez y me acomodo el cabello detrás de la oreja, pregunto ¿quién es? y una voz conocida responde, trago saliva y vacilante tomo la manija de la puerta. Sé que estoy a punto de traspasar la barrera que me encargué de construir cuando dijiste adiós. Miles de preguntas danzan en mi cabeza y me es imposible encontrar las adecuadas para romper el frío e incómodo silencio que presiento nos acompañará al inicio de esta velada. El velo cayó, y nuevamente te encuentras frente a mí, no has cambiado mucho, tu cabello está un poco más largo pero tus brillantes ojos avellana mantienen la misma intensidad al mirarme. Sonríes y te acercas a saludarme, trato de mantenerme distante pero mi fortaleza se desmorona al sentir el cálido y prolongado abrazo. No puedo ser un bloque de hielo cuando estás a milímetros de mis labios, el silencio no es tan molesto como imaginé. Ya no escucho la lluvia y el motor de los carros se oye c